53. «¿Les faltó algo?» – Lucas 22:35

El Señor siempre proveerá para su propio pueblo, que se mantiene a su lado, que hace su voluntad, y que tiene su gloria por objetivo. Si él nos envía, aunque él elija llevar los recursos, nos dará el pan, y el agua
estará asegurada. Los discípulos salieron sin provisiones, pero luego Jesús los guió; al regresar, confesaron que nada les había faltado; el Dios de la providencia les proveyó. Si estamos en el camino del Señor, podemos descansar seguros de que encontraremos a los mensajeros del Señor trayendo nuestra provisión. Los que buscan al Señor lo tienen todo. Él se fija en nuestras necesidades, recuerda sus promesas, elije el momento para sus misericordias, y demuestra ser un Dios fiel.

¿Te ha faltado algo? ¿Algo para el cuerpo? ¿Algo para el alma? Aquel que ha provisto en el pasado, proveerá en el futuro. Jesús está lleno de gracia. Ve, y recibe, para que tu gozo sea completo. Jesús es el Dios de la providencia. Pon tu mirada en él, confía en él, clama a él, y nunca serás desamparado. Cree en su Palabra, él no puede negarse a sí mismo; confía en su fidelidad, y él honrará tu fe, cumpliendo su propia Palabra. «Se le dará su pan, y sus aguas serán seguras» (RVR1960).

Su amor en el pasado me impide pensar
que al final me dejará hundirme en problemas;
cada dulce Ebenezer que vuelvo a analizar
confirma que le agrada ayudarme a vencer.

Por: James Smith
Traducido por: Proyecto Nehemias