
107. «El cual me amó» – Gálatas 2:20
¿Quién era Pablo? Un blasfemo, un perseguidor, alguien que injurió a la iglesia de Dios. ¿Y Jesús amó a Pablo? Sí: «Él me amó». Entonces el amor de Jesús es gratis, y no depende de lo que el hombre haga. La causa del amor está en Dios, no en los objetos amados. Tal vez hayas buscado alguna razón para entender por qué Dios te ha amado, pero te has decepcionado; el Señor dice: «Los amaré de pura gracia». Cuando estábamos muertos en nuestros pecados, nos dio vida porque nos amó; nos reveló a Jesús porque nos amó; nos ha dado a su Espíritu Santo porque nos amó. Si Dios ama, nunca abandona. Jesús nos ama esta mañana con un amor de pura gracia, infinito y eterno. Él ama nuestra persona, más allá de nuestras bondades y acciones; estas son consecuencias de su amor, y no, estrictamente hablando, los objetos de su amor.
¡Oh Espíritu Santo! Susurra esta mañana a nuestro corazón: «Jesús te amó a ti, a ti mismo». ¡Oh, si pudiéramos corresponder su amor! ¡Amarlo por sobre la salud, la riqueza, el bienestar, la vida misma! ¡Oh,
exhibir las alabanzas de su amor con humildad, fe, constancia y fervor!
Gran Dios, a tu amor omnipotente,
¿qué honores rendiré?
Ni todos los sublimes cánticos del cielo,
pueden rendirte la alabanza que mereces:
¡Tu amor sobrepasa mi entendimiento!
¡Oh si pudiera alabarte como debiera!
Por: James Smith
Traducido por: Proyecto Nehemias
Deja un comentario