Reflexión y Recursos Bíblicos basados en la Gracia de Dios

03. «Sean agradecidos» – Colosenses 3:15

¡Qué motivo y qué razón tenemos para estar agradecidos! Rodeados de misericordias, temporales y espirituales. Si miramos hacia atrás, deberíamos regocijarnos porque Dios nos ha escogido en Cristo Jesús, antes de la fundación del mundo; porque envió a su Hijo unigénito al mundo, como propiciación por nuestros pecados; porque envió a su Espíritu Santo a nuestros corazones, para convencernos del pecado, para guiarnos hacia Jesús y reconciliarnos para entrar al paraíso. Tenemos su Palabra en nuestras manos, su gracia en nuestros corazones, sus misericordias en nuestros hogares, y su paraíso ante nuestros ojos. ¡Eso merece tener un corazón agradecido!

Pero llevemos a Jesús nuestros corazones pobres, duros y desagradecidos; él puede atenuarlos y llenarlos con gratitud. Confesemos nuestra ingratitud ante él, y lamentemos nuestro desagradecimiento a sus pies. Él está dispuesto a perdonar. Puede santificarnos por completo. Oirá nuestro clamor, y se compadecerá de nuestras dolencias. ¡Oh Jesús, concédenos un sentido profundo de nuestra total indignidad, y de tu bondad inmerecida, de manera que nuestras almas puedan diariamente alabarte con labios gozosos! Que podamos vivir conscientes de ser personas dependientes; como hijos agradecidos y bondadosos, ante nuestro Padre y nuestro Dios; y seamos agradecidos todos los días.

Por toda la eternidad, a ti
elevaré una canción de gozo;
¡Pero la eternidad es tan breve
para expresar toda tu alabanza!

Por: James Smith
Traducido por: Proyecto Nehemias

Deja un comentario

%d